Desde el Renacimiento italiano, la incipiente incursión de distintos materiales de aquellos calificados como nobles, no ha dejado de cesar.
Es tan numerosa la proliferación de otros componentes, que nos llevaría arduo trabajo hacer una recopilación de todos.
Ha sido la categoría de escultura, la que ha acogido también múltiples actuaciones artísticas ( instalaciones, video instalaciones, performances, arte electrónico…)
Alguno de esos materiales, menos convencionales, están en esta página, a modo expositivo dentro de las casi infinitas posibilidades en este campo polivalente en continua expansión.
Si hablamos de ciudades musicales españolas, indiscutiblemente sonará el nombre de Valencia.
Sus bandas de música revisten sus calles y la presencia de la música, es una característica de la comunidad Valenciana.
Dentro de este contexto musical, la ciudad de Buñol, me da la oportunidad en 1997 de revestir de musicalidad la fachada principal, del hoy conocido, como Cine- Palacio de la música de Buñol.
La inmediatez en el encargo por la pronta inaguración, hace que elija realizar solo una de las tres esculturas encargadas, el elemento central con la figura del genial Beethoven.Los otros dos flamantes músicos, a derecha e izquierda, que componen este elenco musical, serán realizados por otros dos escultores, Ángel Hernández y Begoña Zornosa, para poder así completar este raudo encargo, en el tiempo previsto, gracias también a la inestimable colaboración del departamento de escultura de la facultad de San Carlos, de la UPV de Valencia, con sus magistrales consejos y sapiencia siempre.
La elección definitiva del material, quedó supeditada al poco tiempo disponible, para realizar una talla en piedra. Por este motivo, la elección final fue realizar un modelado en arcilla perdido, para sacar molde después y rellenar de otro componente, calculando el tamaño final, sabiendo que iba a ser colocado en un pedestal e insertado en una hornacina. EL molde a su vez, fue revestido de moloquita, (colocando ventiladores día y noche para acelerar el proceso de secado), que es un tipo de caolín calcinado a altas temperaturas, del que se ha eliminado el agua química, dióxido de carbono y otros gases volátiles, consiguiendo la forma más pura del caolín.
Finalmente las tres estatuas fueron patinadas en bronce y revestidas de un especial barniz, para protegerlas de la intemperie.
Las pátinas pueden cambiar casi por completo el aspecto final de una escultura.
Existen múltiples efectos que se pueden dar, tantos como diversidad de materiales que encontramos.
Podemos añadir pigmentos, limaduras, óleos…y aplicárlos sobre multitud de materiales, como cerámica, madera, hierro, cobre o incluso materiales sintéticos.
Patinar y volver a poner la pieza en el horno, es un recurso a veces tan bueno como cuando haces una lasaña y la gratinas, el resultado es diferente.